Pensamiento

"Concentrarse en lo metodológico no va a resolver ninguno de los problemas con que tropieza usted, pero al meno sabrá lo que son esos problemas."



James Buchanan (1979)

sábado, 24 de julio de 2010

El método científico

Toda investigación parte de un conjunto de ideas y proposiciones que versan sobre la realidad y sus descripciones y explicaciones; el científico, por más que esté persuadido de la verdad de estas proposiciones, no las podrá sostener hasta que, de algún modo, puedan ser verificadas en la práctica. Una proposición es verificable cuando es posible encontrar un conjunto de hechos, previamente delimitados, que sean capaces de determinar si es o no verdadera.

Una metodología es un modo de realizar el análisis sistemático de los principios racionales que guían los procesos de adquisición de saberes epistémicos (contrapuestos a la Doxa, es decir, saberes en filosofía, ciencias, métodos prácticos etc.), así como de los procesos de configuración de los contenidos de una ciencia o disciplina en sus estructuras, articulación y conexiones temáticas, es decir, una metodología es una meta-observación sobre los contenidos de una ciencia, teoría o sobre los métodos de ésta.

Cada disciplina tiende a crear su propio estilo de reflexión sobre sus métodos.
Al considerar esas estructuras de las distintas disciplinas podemos centrar nuestra meta-observación o reflexión metodológica sobre:
a) el modo en que definen su campo propio de objetos o problemas;
b) el modo y métodos (lo que programa el trabajo científico) seguidos;
c) los tipos de enunciados, generalizaciones o abstracciones empleadas, modos de realizar inferencias etc.;
d) sus presuposiciones acríticas o metateóricas, así como sus relaciones con otras ramas del saber;

La metodología es una rama de la Filosofía de la Ciencia que trata pues de los métodos y técnicas de la adquisición de conocimientos, investigación, elaboración de resultados de ésta, y que busca depurar los conocimientos “válidos”. Ciertamente es frecuente el error de confundir metodología con metódica (conjunto de métodos), pero debería evitárselo para conservar la riqueza semántica del término griego.

Para que estas reflexiones sobre “métodos y metodologías” ayudar a clarificar este complejo dominio hay que comenzar diferenciando entre los siguientes conceptos que muchas veces se usan como sinónimos:
Método: procedimiento, técnica, modo de trabajo guiado por reglas.
Metódica: que muchos comprenden como un conjunto de reglas canónicas sobre el empleo de ciertos métodos, conjunto de métodos.
Metodología: como teoría que trata de todos esos campos.

Ahora bien, el método es el camino a seguir mediante una serie de operaciones, reglas y procedimientos fijados de antemano de manera voluntaria y reflexiva para alcanzar un determinado fin. El método no debe ser visto como un ritual, no es nada en sí mismo, sólo tiene valor en el contexto de la investigación, como un mecanismo de interrelación entre el sujeto y el objeto. Etimológicamente, el vocablo método proviene del griego métodos, guía y modo. Meta significa por, hacia, a lo largo; y hodos significa camino o vía; la unión de ambos términos conduce al significado de “camino hacia algo o por el camino”. (Palella y Martíns, 2004).

Dentro de este contexto, los métodos de acuerdo a sus facultades se pueden clasificar en:

Método Inductivo: Aluden a aquellos procedimientos que van de lo simple a lo compuesto, es decir, de las partes al todo. Se caracterizan porque incluyen una síntesis. Consisten en la recopilación de varios datos y la observación de suficientes hechos referidos a un problema en particular, analizarlos para descubrir sus analogías y diferencias, compararlos y tomar nota de sus características comunes para formular la regla que explica el comportamiento de esa clase de datos. Con esto último se generalizan sus características a toda la población estadística de los hechos observados. El número de observaciones debe ser suficiente para dar confiabilidad a la generalización. Este método asciende de lo particular a lo general, de los hechos individuales a los generales.

Método Deductivo: Están basados en la descomposición del todo en sus partes. Van de lo general a lo particular y se caracterizan porque contienen un análisis. Parten de generalizaciones ya establecidas, de reglas, leyes o principios destinados a resolver problemas particulares o a efectuar demostraciones con algunos ejemplos. El método deductivo sigue un curso descendente, de lo general a lo particular, o se mantiene en el plano de las generalizaciones.

No obstante, y a pesar de la clasificación anterior, es necesario acotar que en la mayoría de las investigaciones, los métodos son utilizados o proceden de modo dialéctico, es decir, inductiva y deductivamente, porque el investigador formula hipótesis para explicar los fenómenos, partiendo de su experiencia y alguna teoría, aplicando el método para probar su hipótesis.

Esta inicial distinción puede ayudar a que al discutir sobre este campo temático se opere con la limpieza conceptual que es precisa para no generar, por defecto en la misma comunicación, confusionismo o problemas ficticios. En un sentido muy general, el marco metodológico es comprendido como camino (a seguir en pensamiento o acción) describible con mayor o menor precisión, es decir: una serie finita de instrucciones más o menos concretas para la acción - máximas que guían, por ejemplo, la estrategia a seguir en un trabajo de investigación - y que permite alcanzar una meta, fin o un determinado objetivo, o solucionar un problema concreto.

Ese fin, cuyo logro se facilita cuando se sigue un buen camino-método, puede ser de conocimiento práctico, y puede tener un carácter abstracto o referirse a algo personal o vital. En general, en el ámbito práctico, los métodos más desarrollados se han creado sólo a un nivel muy parcial, como ayudas para resolver ámbitos de problemas muy concretos materiales, técnicos etc. Además, en la comprensión habitual del término en el ámbito científico, el marco metodológico se contrapone a la suerte, al azar, se le concibe como conjunto de reglas sistematizadas que deben guiar el modo de proceder en un determinado ámbito de trabajo.

Unidad I: El Problema

Concepto.
El significado que el término posee en el lenguaje coloquial es muy similar al que posee en el lenguaje técnico. Por problemas el común de las personas entiende una situación confusa que amerita aclaración, o la presencia de algún elemento que entorpece la marcha regular de los acontecimientos.
Características de un Problema.
Es necesario analizar determinadamente el problema que se piense investigar, antes de acometer cualquier otra acción que acarree gastos, tiempo, o esfuerzo personal.
a. Resoluble: la naturaleza del problema debe ser tal, que permita llegar a una solución. Podría investigarse como afecta la gratuidad de la Educación Superior, el grado de motivación y los niveles de productividad académica en los estudiantes.
b. Delimitado: para poder llevar a cabo un estudio, hay que saber con precisión hasta donde se extenderán sus conclusiones, y cuales factores serán tomados en consideración. Un problema muy amplio o que aborde muchas variables, impide prácticamente su análisis.
c. Relevante: aunque el investigador debe sentirse libre al momento de seleccionar el problema, en el sentido de que éste debe ser su gusto, y preferencia para poder dedicarse a él con entusiasmo y constancia, debe valorar, no obstante, la importancia que el mismo posee. La relevancia afirma que el problema debe poseer un valor significativo
a. Relevancia científica: aporte de nuevos conocimientos.
b. Relevancia humana: mejoramiento de la vida social.
c. Relevancia contemporánea: solución de problemas actuales.

Planteamiento del Problema.
El planteamiento del problema es la fase inicial en todo proceso investigador y es además la más importante, porque determina y encauza todas las acciones que habrán de seguirse posteriormente. Un planteamiento mal delimitado hará engorrosa e interminable la búsqueda de datos. Generalmente es una de las etapas más breves de una investigación; sin embargo, en ocasiones, puede llegar a ser la etapa más larga del proceso, debido a causas como pueden ser falta de información, poca visión, falta de comunicación, etc.
La pregunta es la pauta que sugiere el sentido de búsqueda; las acciones, medios, recursos, técnicas o procedimientos involucrados serán convenientes en la medida que favorezcan a proporcionar los datos que permitan dar forma a la respuesta.
La pregunta puede expresar varias ideas por lo que se deben tomar en cuenta los siguientes puntos para la realización del problema de investigación:
• ¿Qué se quiere investigar?.
• ¿Cómo se quiere investigar?
• ¿Hasta donde se quiere investigar?
• ¿Con qué elementos se cuenta para la realización de la investigación?
• ¿Para qué se quiere investigar?
• ¿Con cuanto tiempo se dispone?

Unidad II: Marco Teórico


Concepto.

El marco teórico, marco referencial o marco conceptual tiene el propósito de dar a la investigación un sistema coordinado y coherente de conceptos y proposiciones que permitan abordar el problema. De éste dependerá el resultado del trabajo. Significa poner en claro para el propio investigador sus postulados y supuestos, asumir los frutos de investigaciones anteriores y esforzarse por orientar el trabajo de un modo coherente.
El fin que tiene el marco teórico es el de situar a nuestro problema dentro de un conjunto de conocimientos, que permita orientar nuestra búsqueda y nos ofrezca una conceptualización adecuada de los términos que utilizaremos. El punto de partida para construir un marco de referencia lo constituye nuestro conocimiento previo de los fenómenos que abordamos, así como las enseñanzas que extraigamos del trabajo de revisión bibliográfica que obligatoriamente tendremos que hacer.
Síntesis del contexto general (local, nacional y mundial) en el cual se ubica el tema de la propuesta, estado actual del conocimiento del problema, brechas que existen y vacío que se quiere llenar con el proyecto; porqué y cómo la investigación propuesta, a diferencia de investigaciones previas, contribuirá, con probabilidades de éxito, a la solución o comprensión del problema planteado.

Las funciones principales del marco teórico son las siguientes:
a. Orienta sobre el conocimiento del tipo de investigación
b. Amplia el horizonte de estudio, pues da opciones de puntos de vista
c. Conduce al establecimiento de hipótesis
d. Inspira líneas de investigación
e. Prevé la manera de interpretar los datos provenientes de la investigación
Una teoría es un conjunto de conceptos, definiciones y proposiciones relacionados entre sí, que presentan un punto de vista sistemático de fenómenos especificando relaciones entre variables, con el propósito de explicar y predecir los fenómenos.

Función de las teorías:
1. La función más importante de la teoría es explicar porqué, cómo, quién, cuándo, quién dónde ocurre un fenómeno.
2. Explica diferente manifestaciones del fenómeno.
3. Describe como se origina, evoluciona y afecta el fenómeno.
4. Sistematiza el conocimiento aislado y difuso.
5. Hace predicciones acerca del futuro del problema.
6. Explica las relaciones con diferentes variables.
¿Cómo se evalúa una teoría?
Todas las teorías aportan conocimiento. Los criterios más comunes para evaluarla son:
a. Capacidad de descripción.
b. Consistencia lógica
c. Perspectiva
d. Fructificación heurística –generadora de nuevas interrogantes-
e. Parsimonia –sencillez-

Antecedentes de la Investigación.
En muchos trabajos de investigación no se presenta una sección aparte denominada "marco teórico", sino que se exponen sus características dentro de lo que se denomina "revisión bibliográfica" o "antecedentes".
En otras ocasiones, cuando se trata de una investigación donde el marco referencial se reduce a algunas pocas proposiciones, éstas pueden insertarse al comienzo del trabajo, sin merecer una aclaración mayor. Es el caso de estudios aplicados o de investigaciones que buscan extender conceptos bien conocidos o nuevos estudios.
En síntesis, el marco teórico responde a la pregunta: ¿qué antecedentes existen? Por ende, el marco teórico tiene como objeto dar a la investigación un sistema coordinado y coherente de conceptos, proposiciones y postulados, que permita obtener una visión completa del sistema teórico, sobre el conocimiento científico, que se tiene acerca del tema. La conclusión del marco teórico debe ser que existe un problema científico y ése es el que los investigadores van a abordar.

Unidad III: Marco Metodológico y sus Elementos

Unidad IV: Presentación de la Información


Después que el investigador concluye la etapa de recopilación tiene que enfrentarse a una masa informe de respuestas y cifras que, tratándose de estudios complejos, producen la sensación de impotencia, desorientación y confusión.

Lo primero que suele hacerse con el conjunto de los datos obtenidos es dividirlos de acuerdo a un criterio bien elemental, separando de un lado la información que es de tipo numérica de la información que se expresa verbalmente o mediante palabras. Los datos numéricos quedarán como tales, cualquiera sea su naturaleza, y se procesarán luego para exponerlos en forma clara y fácilmente asimilable. El objetivo final será construir con ellos cuadros estadísticos, promedios generales y gráficos ilustrativos, de tal modo que se sinteticen sus valores y se pueda extraer, a partir de su análisis, enunciados teóricos de alcance más general.

Mientras, los datos que se presentan de forma verbal podrán sufrir dos destinos diferentes: se convertirán en datos numéricos o quedarán como información no cuantificada, cualitativa. El criterio a adoptar dependerá de circunstancias concretas: de los objetivos del trabajo, de la posibilidad de cuantificar cada variable, del tamaño del universo o muestra considerados y de varios otros criterios. En todo caso se debe tener presente que, siempre que tenga sentido, es preferible cuantificar en lo posible los datos obtenidos. No existe, como pretenden algunos metodólogos parcializados, ninguna oposición entre datos cuantitativos y datos cualitativos: lo que existe es un diferente grado de precisión y de complejidad en cada una de las variables que medimos, de modo tal que siempre es posible abstraer de ellas algunos aspectos cuantitativos en tanto que otros, por su complejidad, tendrán que permanecer como cualitativos.

Procesamiento de datos cuantitativos: Después de esta clasificación, para analizar y comprender los datos cuantitativos recogidos, los primeros pasos necesarios son la codificación, tabulación y graficación de los mismos. Analizar significa desatar, descomponer, separar; tomar un todo y dividirlo en sus elementos constitutivos, a tales efectos, Sabino (1992) determina las siguientes fases:

La codificación: la codificación es un procedimiento que tiene por objeto agrupar numéricamente los datos que se expresen en forma verbal para poder luego operar con ellos como si se tratara, simplemente, de datos cuantitativos.

El primer paso a dar frente a todos estos datos es realizar una revisión atenta de un subgrupo reducido de ellos con el objeto de encontrar una tipología de respuestas posibles, en concordancia, por otra parte, con las formulaciones teóricas que guían la investigación y con los criterios adoptados en la etapa de operacionalización. A cada categoría de respuestas habremos de darle un código particular, un número o letra diferente, que servirá para agrupar tras de sí a todas las respuestas u observaciones que sean idénticas o que, al menos, aparezcan como equivalentes. Luego procederemos a señalar a cada uno de los cuestionarios u hojas de observación con el código que le corresponde en cada caso, con lo que quedará sintetizada la respuesta que contiene. El proceso se facilita grandemente cuando se realiza mediante computadoras.

La tabulación: la palabra tabulación deriva etimológicamente del latín tabula, y significa hacer tablas, listados de datos que los muestren agrupados y contabilizados. Para ello es preciso contar cada una de las respuestas que aparecen, distribuyéndolas de acuerdo a las categorías o códigos previamente definidos. Cada una de las preguntas de un cuestionario o de una hoja de observación tendrá que ser tabulada independientemente, por lo que es preciso hacer previamente un plan de tabulación que prepare adecuadamente la tarea a realizar.

Esta etapa del trabajo puede desarrollarse manualmente, mediante el procedimiento que esbozaremos a continuación, cuando se trate de un número relativamente pequeño de datos; cuando esto no sea así resultará mejor acudir al procesamiento electrónico de datos, para lo cual existen ya adecuados paquetes de computación (como por ejemplo el CD incluido en el libro de Hernández y otros, o el Start Graphic) que facilitan grandemente esta tarea.

Cuadros estadísticos o tablas de frecuencias: luego de terminar con la tabulación de toda la información contenida en los instrumentos de recolección es preciso presentar los resultados de modo tal que estos se hiciesen fácilmente inteligibles aun para los lectores no especializados. Para lograrlo es preciso presentar los datos en la forma más clara posible, haciendo explícito cualquier elemento que pueda dar origen a confusiones o dobles interpretaciones y ordenando toda la información de la manera más rigurosa.

Después de encontrar un título adecuado para el cuadro, la tarea siguiente es convertir en porcentajes las cifras reales (llamadas absolutas) que hemos obtenido de la tabulación. Ello permite, por una parte, tener una mejor idea de lo que puede representar una parte frente al todo. Es muy claro lo que significa que 23% de la gente prefiere X y no Y. En cambio no percibimos tan claramente el valor relativo de 171 respuestas favorables a X sobre el total de 743 casos. De la misma manera, la práctica de la porcentuación permite, de una rápida ojeada, percibir diferencias y similitudes, apreciar variaciones y tendencias y hacer comparaciones con otras investigaciones. Por ello su uso es constante prácticamente en todos los cuadros estadísticos.

El valor en función del cual se hace el cálculo de los porcentajes (en el ejemplo anterior, 743), se llama base del porcentaje. Cuando tal base es un número demasiado pequeño no se suelen calcular los porcentajes, pues hacerlo podría inducir a que el lector se hiciese una idea falsa acerca de la exactitud de la información: no tiene mucho sentido decir que 83,3% de los integrantes de una muestra poseen automóvil por el simple hecho de que, sobre seis personas consultadas, haya cinco que sí lo posean. Por eso, cuando la base es menor de 15 o de 20 casos (el límite se fija convencionalmente) se suele presentar la información en cifras absolutas y no relativas.

Las cifras presentadas deben tender a redondearse en lo posible, pues se introduce cierta confusión al mencionar que hay 32,87% de una cierta categoría y 67,13% de la contraria. Mucho más simple es hablar de 33% contra 67 por ciento.

Cuando se trate de un cuadro que expone una pregunta de elección múltiple la base del porcentaje será siempre el total de personas que responden y no el total de respuestas existentes, pues es lo que tiene más sentido lógico: decir que un 54% de los entrevistados ha migrado por motivos económicos de acuerdo a los datos de la tabla presentada en 10.3.2B tiene mucho más sentido que decir que un 49% de las respuestas dadas por los entrevistados aluden a motivos económicos.

Graficación: La graficación es una actividad derivada de la anterior que consiste en expresar visualmente los valores numéricos que aparecen en los cuadros. Su objeto es permitir una comprensión global, rápida y directa, de la información que aparece en cifras. Es sumamente útil, especialmente cuando nos dirigimos a lectores con poca preparación matemática, aunque siempre es recomendable por el valor de síntesis que posee. El criterio del investigador junto con sus conocimientos matemáticos serán los encargados de determinar cuál es el gráfico más apropiado para cada conjunto de datos.

Procesamiento de datos cualitativos: En este punto se describen las operaciones que son necesarias realizar con aquellos datos verbales o comentarios escritos que no se puede o quiere cuantificar, y que por lo tanto se habrán de mantener en forma puramente cualitativa. Por lo general, la mayoría de estas informaciones se recolecta mediante fichas, a las que haremos referencia de ahora en adelante, aunque las consideraciones que exponemos son válidas, en general, para todo tipo de información verbal.

Se tomará entonces, una masa de datos, donde se supone que se encuentra la información necesaria para desenvolver la investigación. Estos datos, sumados a la experiencia del investigador, permitirán y desarrollar las respuestas a los interrogantes iniciales de la investigación o servirán, de un modo más limitado, para esclarecer ciertos puntos específicos que es preciso exponer: marco teórico, antecedentes históricos del problema, etc.

Es necesario señalar que sea cual sea el tipo de dato manejado (cuantitativo o cualitativo) se deben presentar ordenadamente e irlos explicando y comentando de manera que queden claros los resultados obtenidos en la investigación y las relaciones encontradas entre las variables, así como la comprobación rechazo de las hipótesis. Su importancia, radica en que a partir de estos hallazgos, se realizaran las conclusiones y recomendaciones propias de la investigación.

La Triangulación como herramienta del análisis cualitativo: En los actuales momentos ha tenido mucho auge la investigación cualitativa y por ende el análisis de datos cualitativos, indudablemente también han surgidos herramientas para estos análisis como es el de la triangulación, la cual consiste en determinar ciertas intersecciones o coincidencias a partir de varios puntos de vista del mismo fenómeno. Es necesario señalar que a pesar de ser una herramienta de tratamiento cualitativo la misma puede ser utilizada con métodos cuantitativos de investigación.

La triangulación implica reunir una variedad de datos y métodos referidos al mismo tema. Se recoge la información desde puntos de vistas distintos, lo que permite realizar múltiples comparaciones de un problema utilizado perspectivas y procedimientos diversos. Este procedimiento presenta ventajas porque, al emplear diversos métodos en la investigación, éstos actúan como filtros, lo que permite mayor nivel de concreción y objetividad de los resultados analizados.